martes, 25 de septiembre de 2018

CAJAS DE SEGURIDAD EN ARGENTINA

Según un relevamiento realizado por ZonaBancos.com sobre 77 cajas de seguridad, son principalmente 5 tamaños los que trabajan las entidades financieras de Argentina.
Tamaños y precios de cajas de seguridad
Las entidades que fueron relevadas son:
Generalmente los tamaños de las cajas de seguridad se exponen en términos de alto, ancho y profundidad. Es así que cuando nos referimos a una caja de 10x15x60 nos estamos refiriendo a una caja de 10 cm de alto, 15 cm de ancho y 60 cm de profundidad.
También se puede hacer referencia al volumen de la caja de seguridad cuando nos referimos a su volumen. Continuando con el ejemplo de la caja de 10x15x60, decimos entonces que su volumen es igual a 9.000 cm3 (resultado de multiplicar 10x15x60).
De acuerdo al estudio, ZonaBancos.com ha clasificado los tamaños de las cajas de seguridad en Extra chica, Chica, Mediana, Grande y Extra grande. Las medidas y volumen se exponen en la siguiente tabla:
 Cajas de seguridad medidas standards

La medida más chica corresponde a una caja de seguridad de 10x15x60 cm o 9000 cm3. Mientras que la medida de las cajas con mayor espacio para guardar los bienes (Extra grande) es de 30x60x60 o 108.000 cm3. Como puede observarse, el cofre “Extra grande” es 12 veces más grande que la caja “Extra chica”.
Por último, cabe destacar que la caja de seguridad de 30x60x60 cm es la más ofrecida por las entidades relevadas (21 resultados) y la “Grande” la menos ofrecida (11 resultados).

sábado, 22 de septiembre de 2018

INNOVACIÓN FINANCIERA EN ARGENTINA

Avanza la innovación financiera en Argentina

Homeless con código QR para recibir donaciones en la calle. Iglesias y templos que reciben diezmo por transferencias inmediatas. Cargar nafta y pagar con celular. Abonar las facturas de luz o gas con un celular. Comprar cualquier producto, de cualquier parte del mundo, y recibirlo en el hogar, sin tocar un solo billete. Todas estas situaciones y muchas otras son el resultado del avance de la innovación financiera, que en la Argentina picó en punta.
Reunidos en el III Foro Latinoamericano de Innovación Financiera realizado en el Scala Hotel de Buenos Aires, CEOs, CIOs, directores y gerentes de bancos, telcos, fintech y aseguradoras, repasaron las experiencias más disruptivas de la industria financiera, con el objetivo de ampliar las estrategias y conseguir nuevos mercados y consumidores. Expertos analistas y líderes empresarios compartieron testimonios sobre la revolución digital y la posibilidad de hacer negocios con las nuevas tecnologías. El factor común: ¿es posible vivir sin dinero en efectivo?
Para el exvicepresidente del Banco Central, Lucas Llach, la digitalización, la innovación y la inclusión financiera van de la mano. "Para cualquier individuo es mejor que el resto de la gente esté bancarizada. Para un banco si los clientes solo van a actuar con medios electrónicos no va a ir al cajero a retirar plata y es conveniente", comentó al inaugurar el Foro.
"En las tarjetas de crédito hay mucha competencia, pero en el área de pagos no la hay. En el mundo hay un solo proveedor de Visa y uno solo de Mastercard, y eso es malo", describió. En ese marco y fiel a su estilo provocativo, se preguntó con anticipación ¿Para qué sirve una tarjeta de crédito hoy? "Como medio de pago se puede utilizar un celular y que el crédito te lo da el banco. Salvo el consumo en el exterior, no queda claro para qué necesitamos una tarjeta de crédito", se respondió.
La posible extinción de las tarjetas se relaciona con la extensión del "entorno Pay", que permite mover dinero a través de internet, sin necesidad del CBU. "Las cobradoras no bancarias como Rapipago o Pago fácil ya lo permiten. Fue algo que impulsamos desde el Central para competir con el mundo de las tarjetas de crédito. Hubo avances y retrocesos, pero se está instalando", dijo Llach.
Los datos oficiales revelan que en los últimos dos años la proporción de dinero cash bajó en comparación con el nivel de dinero en cajas de ahorro. Al mismo, el monto de transferencias inmediatas aumentó 40%. "A pesar las trabas, está creciendo, y si fuera más fácil, mejor", agregó.
Además de reducir la cantidad de claves para operar, Llach consideró que falta más interacción entre los jugadores del dinero virtual, lo que él llamó una "fertilización cruzada" entre bancos y fintech. "Los que cobran en un banco no van a pasar su sueldo a las fintech, que son muy buenas para pagos y créditos por la instantaneidad. En la calle hoy hay u$s 15.000 millones en pesos de circulación monetaria, en poder de los argentinos. Si eso pasara a los bancos a una tasa de 30% son u$s 5.000 millones más para los bancos", planteó el historiador económico.
Según Llach, en el ideal de que eso ocurra el que pierde es el Banco Central porque tiene que absorver el dinero de los bancos a cambio de una tasa de interés, pero los que ganan son los ciudadanos. "Si la sociedad tiene menos cash, ganamos todos. Si todos nos movemos con pagos electrónicos se resuelve el problema del déficit fiscal de un día para otro, se incluye financieramente a todos, se resuelven el 50% de los casos de inseguridad porque nadie tiene cash. Tiene unas consecuencias enormes sobre la sociedad", destacó.
Lejos del caso imaginario, para Llach igualmente "estamos muy cerca" de conquistarlo. "La estructura para la revolución está. El sistema de transferencias inmediatas de la Argentina es muy bueno. Falta muy poquito para el país sea el líder mundial de la innovación financiera. Ya veamos acá cosas de China o la India", recalcó.
Para Javier Buitrago, gerente de Dinero Móvil, de Nación Servicios, en los últimos dos años la industria financiera dio importantes saltos. "Se puso al día después de 15 años donde no se pudo implementar medidas", comentó en un panel sobre billetera electrónicas y el revolucionario QR.
"Hoy todos estamos obligados a llevar efectivo en la billetera porque nos podemos encontrar en situaciones donde lo necesitamos, como en un estacionamiento o un taxi, a pesar de que tenemos cuentas bancarias, tarjetas y todos los beneficios. Pero en China en cinco años a partir del QR las billeteras virtuales pasaron a tener el 80% de pagos", recordó Buitrago.
¿Es el código QR la herramienta de la inclusión financiera para que todos dejemos de llevar efectivo? "Vamos hacia eso", dijo Hernan Corral, product manager senior de Mercado Pago. "En mayo arrancamos con el QR y hoy ya tenemos 20.000 comercios cobrando así y 130.000 usuarios pagando con ese código. Es hacia dónde va el mundo. Esto es mucho más fácil que pagar cash o con posnet. Descargas una App, tocas un botón, la otra persona lee el código y ya le estás pagando", detalló.
"En las estaciones de servicio antes tenías que darle la tarjeta al playero, iba hasta un lugar donde se pagaba, volvía con el ticket y era una bomba de carga de combustible parada, atrás formando fila. Ahora cargan, pagan y se van", agregó el joven ejecutivo.
Jorge Larravide, gerente comercial de RedLink y representante de VALEpei, consideró que para erradicar el efectivo es clave trabajar en forma colaborativa entre las industrias. "En general estamos más acostumbrados a estar cerrados, defendiendo una posición, y no es lo que se viene. Lo que se viene es lo abierto, lo colaborativo y conectarse entre los actores, para que los usuarios y empresas perciban los beneficios. Se está construyendo un camino. Usar una tarjeta de débito o crédito de plástico es un soporte para un acceso a una cuenta, pero también ya lo estamos haciendo con los celulares y biometría, y en cualquier momento los soportes van a cambiar. Lo que importa es la esencia de lo que se hace. La experiencia del cliente, la usabilidad. Desde la operatoria hay cosas conocidas, pero lo revolucionario es que se use la billetera virtual como un whatsapp", sostuvo.
El CEO de Yacaré.com, Jorge Zanobone, aseguró este es camino para la inclusión financiera y la digitalización total, aunque aclaró que se deberían dar otras situaciones. "Es clave que el QR permite identificar el comercio aunque no resuelve nada solo. La segunda condición es que las billeteras, los bancos y el mobile bank aproveche ese mecanismo para llevarle sus pagos. Si las dos cosas se dan, seguramente la inclusión se va a dar. El primer paso está hecho: no tenemos que pedirle al comercioque invierta o haga un gasto especial para que todos podamos enviarle un pago. Ahora viene la segunda parte y es la punta del iceberg", afirmó.
Corral recordó la experiencia con Mercado Libre para vencer prejuicios, donde muchos pensaban que la gente no iba a comprar un artículo sin verlo. "El objetivo cercano de Mercado Pago en América latina es llegar a 2 millones de usuarios pagando a través de aplicaciones, incluyendo QR y otros servicios. Pero en 600 millones de habitantes dos no es nada. Tenemos un plan a cinco años muy agresivo. Para 2019 el plan es pasar de dos a 12 millones. Para lograrlo tenemos que colocar la mayor cantidad de QR posibles en comercios y de fomentar el uso de la billetera virtual. Las condiciones están dadas, hay que ir por ello", desafió.
El CEO la gestora de pagos Yacaré festejó que tras 40 años de códigos de barras, que son muy difíciles de leer con los celulares, hoy todos van al QR. "Esto permitiría a muchas empresas de servicios poner ese código para pagar por celular. Si estas en el comercio el comprador y vendedor están físicamente, pero utilizando un sistema de una tarjeta que no está presente. Sería el ecommerse en el mundo físico, es un ecosistema nueva. Ya hay grandes empresas que están migrando sus facturas al QR y eso es lo que viene en el futuro", aventuró Zanabone.
En VALEpei destacan que con el QR técnicamente no hay ninguna limitación: todo se puede hacer. "Lo que hay que terminar de alinear son cuestiones comerciales, lo colaborativo, y la cuestión cultural. Las personas están empezando a cambiar hábitos, a querer hacer las cosas más simples. Hoy se puede abrir una cuenta en un banco 100% digital en siete minutos, sin llevar recibo de sueldo, impuestos o servicios, y en seis días tenés las tarjeras de débito y crédito, un préstamo preaprobado y una plataforma para operar. Esto tiene que nacer en todos", sentenció Larravide. La App de Link ya cuenta más de 100.000 descargas de la APP y unas 70.000 personas que las utilizan mensualmente.
Todos coincidieron que una gran puerta hacia el fin del dinero físico en los bolsillos sería que miles de empresas o los estados permitan depositar sueldos en cuentas virtuales asociadas a billeteras electrónicas. Se estima que todavía unos 3 millones de argentinos cobran sus salarios en efectivo. "A medida que la gente se bancariza no hay vuelta atrás. Si hoy nos dicen que a partir de mañana nos pagan el sueldo en efectivo sería un problema. Hay que volver a casa con la plata, buscar dónde guardarla, no sabríamos que hacer. La digitalización es positiva y ningún país que avanzó, luego retrocedió", completó el jefe de producto de MercadoPago, líder en este rubro.
En breve, para atraer más clientes a las cuentas virtuales, MercadoPago ofrecerá hasta 39% de interés para los usuarios que tengan sus sueldos depositados en su plataforma. "Se pagará desde el día uno y casi sin suscribir. Con ese dinero podes pagar con QR, extraer en cajeros, recargar celular, la SUBE, pagar servicios, todo integrando en la billetera y con costo cero, para el que paga y el que recibe", anticipó Corral.
Sin dudas, lograr la atención y captar más usuarios es el gran desafío. "Lo más costoso es el cashIN, poner plata en las billeteras. El pago de sueldos baja los costos, y mejor si nos dan intereses. Pero falta ir al comercio y que tenga el QR. Además, con el CVU podemos pasar planta de billetera a billetera, o a una cuenta bancaria, o para hacer inversiones financieras, bonos o acciones. Se generan un montón de posibilidad de usos que todavía ni se nos ocurrieron", cerró Zanabone.
Fuente: Ámbito

DÓLAR: CRAWLING PEG

Se trata de una devaluación progresiva y controlada de la moneda por el Banco Central. La idea es que la devaluación esté predeterminada y la tasa de cambio sea conocida con anterioridad. En rigor, consiste en una serie de devaluaciones progresivas que tratan de ubicarse por encima de la inflación, pero siempre evitando dar saltos bruscos en el valor de la divisa. Bajo este esquema, el tipo de cambio se va moviendo de acuerdo a una pauta que fije la entidad monetaria.
En el FMI sostienen que el crawling peg puede ser establecido de manera prospectiva (con un ajuste atado a un tipo fijo preanunciado y/o de la inflación proyectada). Como se dijo, de esta forma se permite una progresiva devaluación de la divisa con un efecto menos traumático en la economía. Además, esta técnica ayuda a prevenir, o al menos a amortiguar, la especulación sobre la divisa.
A la vez, sostienen, esto podría recuperar algo del flujo de entrada de dólares de no residentes y de esa forma compensar en parte la salida de dólares. Comenzar usando el dólar como ancla nominal y migrar a un sistema de crawling peg para darle más certidumbre a los mercados.
La última vez que se utilizó este mecanismo en Argentina fue bajo la gestión económica del ex ministro Axel Kicillof. En aquel momento, el gobierno kirchnerista buscaba compensar la pérdida de competitividad de los últimos años, en donde la inflación le había ganado por lejos a la suba del dólar. Si bien en ese entonces este mecanismo no funcionó del todo porque el atraso del tipo de cambio era importante, las hipótesis que manejan los equipos económicos del actual Gobierno es que ahora sería distinto porque la devaluación efectuada durante este año cambió esa base de comparación. El tipo de cambio real se encuentra en niveles de 2008-2013.
En rigor, según sostienen en el mercado, el nivel del dólar parece suficiente para equilibrar los flujos externos y para que las reservas alcancen como back up para la base monetaria. La idea es que con sólo mantener la devaluación en línea con la inflación, podría estabilizarse el mercado cambiario sin perder competitividad y dando señales claras para la fijación de precios.
Por supuesto existen varios talones de Aquiles, pero quizás el principal es cómo hacer para que los exportadores no retengan su liquidación bajo la expectativa de que, cuanto mayor es la demora, mayor cantidad de pesos van a obtener por esos dólares que van a vender. El resto de las variables, piensan en el Palacio de Hacienda, deberían ir cediendo: tasa de interés, déficit fiscal, gasto público e inflación.
Por último, y como el éxito de este sistema dependerá en buena medida, dicen, de la contención de las presiones en materia salarial y de precios, en el Gobierno estudian algún mecanismo para evitar la aceleración de la inflación. Cerca del presidente Macri sostienen que es necesario llevar a cabo un acuerdo o esquema entre el Gobierno, empresarios y sindicatos para frenar la indexación de la economía ante la escalada del dólar.
Fuente: Ambito

sábado, 15 de septiembre de 2018

Una propuesta para ayudar a los deudores de créditos UVA

Francisco Rinaldi
frinaldi@lanueva.com
Suba del dólar y aceleración de precios mediante, el boom de los créditos para vivienda indexados ya no es lo que era. Con una demanda muy baja por la enorme suba de los precios de las propiedades y una cuota que pesa más en el presupuesto familiar, la cuestión genera preocupación. 
De hecho, desde la oposición insisten con la necesidad de reformar la operatoria, ya que, según cálculos del economista Ariel Setton, la relación cuota-ingreso para el solicitante era del 25 por ciento cuando lo solicitaron, para, este mes, trepar hasta el 28,5%. 
Una de las iniciativas pertenece a legisladores del Frente Renovador -Marco Lavagna- aunque también existen ideas de otros espacios políticos. 
La propuesta de Lavagna fue realizada en coautoría con el economista Martín Grandes, con quien dialogamos vía telefónica. Grandes es docente de grado y posgrado de varias casas de Altos Estudios, investigador de Conicet, además de asiduo visitante como docente a la UNS. 
Los tramos salientes, a continuación: 
--¿De qué se trata el Fondo Fiduciario de Compensación Hipotecaria? 
--Se trata de un fondo anticíclico fiscal cuyo primer objetivo es la compensación en caso de licuación de salarios para deudores hipotecarios, de manera de evitar una situación de insolvencia.
 “La ley original de crédito ajustable por Unidad de Valor Adquisitivo (UVA) permite refinanciar el préstamo en hasta el 25 por ciento cuando la cuota supera el 30% del ingreso neto, adecuando la cuota a esta situación”. 
“El problema es que con una inflación del 40% y con paritarias que, en el mejor de los casos, no superan el 27%, una persona endeuda en UVA ve que mes a mes, el pago de su vivienda se hace cada vez más difícil, porque representa una fracción mayor de su presupuesto”. 
“La idea es evitar esto, dando un marco general de certidumbre al deudor”. 
--De hecho, ya está pasando...
---Si, porque mientras los ingresos de la gente se actualizan al ritmo de las paritarias, que, como antes le mencioné, no pasan del 27% interanual y una inflación que excedería el 40 -o incluso más- hoy la cuota es más pesada para la gente (N de R: la cuota de un préstamo UVA sigue al Coeficiente de Estebilización de Referencia, cuyo insumo básico es el Indice de Precios al Consumidor que mensualmente elabora el INDEC. Según datos del BCRA, la UVA aumentó 31% en un año). 
--¿Y cómo funcionaría?
--La idea es iniciar un fondo fiduciario que se alimente, primeramente, con fondos del Tesoro nacional y un 10% de utilidades del BCRA. 
“Más adelante, el fondo se retroalimentaria de la siguiente forma: cuando los asalariados perciban un aumento por encima de la inflación que es hasta un 5% más alto con respecto al promedio de los precios minoristas, los trabajadores no deben aportar nada al fondo, pero cuando la suba salarial está por arriba de ese porcentaje, los deudores UVA deberían hacer su contribución por el monto que resulte de esa diferencia, por lo que tendrían que afrontar una cuota más elevada en esas circunstancias.
“Se agrega un seguro fijo, de monto a definir, que se paga siempre y contribuye a alimentar al fondo, junto con las inversiones financieras que se realicen”. 
“Bajo un escenario contrario, como lo es el actual, cuando la inflación excede a los salarios, el deudor resulta protegido porque su cuota se actualiza por el aumento salarial emergente del Coeficiente de Variación Salarial (CVS) que estima el INDEC y no por la UVA-inflación”. 
--¿Y el banco? Si el CVS está por abajo de la inflación...
--No cambiaría su situación bajo ninguna circunstancia porque va a seguir cobrando en UVA, siendo “compensado” por el fondo, que posee el seguro fijo, las diferencias salarios-inflación, los aportes originales más las inversiones. 
--¿Hay alguna experiencia exitosa en que se base el proyecto?
--Si. El sistema de seguro o “Swap” propuesto en este proyecto de ley fue implementado exitosamente por México después de su crisis de 1995 en años de alta inflación, volatilidad macroeconómica general y salida de una crisis bancaria traumática. 
“Más aún, el sistema mexicano, es decir su Fondo Fiducario para la Vivienda (FOVI) creado en 1963 y sucedido por la Sociedad Hipotecaria Federal en 2001-2002 con una finalidad amplia en materia de política de vivienda, implementó un seguro similar al propuesto en este proyecto de ley, resultando ampliamente superavitario su fondo fiduciario de cesar el otorgamiento de seguros y garantías a los préstamos hipotecarios en 2013”. 
--¿En qué estado está el proyecto? 
--Fue presentado hace un año y espera tratamiento. Los meses venideros van a ser complejos porque el debate por el Presupuesto va a dominar la escena. 
--¿No se corre el riesgo de desfinanciar al fondo? 
--En los últimos 24 años la inflación le ganó al salario en la mayoría de las oportunidades, con lo cual, ese riesgo al que refiere es bajo. 
--“Y los años en que el salario pierde poder de compra, el fondo cuenta con capital propio, como ya he mencionado. 
--Alguien podría responderle que el crédito fue un inmejorable negocio para el deudor, porque su casa también subió de precio por la depreciación cambiaria...
--...y yo le diría que está equivocado. El inmueble es del banco y patrimonialmente no puede computarlo como propio, sencillamente, porque sirve de garantía de repago de la deuda asumida. 
En resumidas cuentas, no le pertenece y no es correcto eso de que mejora patrimonialmente. 

viernes, 7 de septiembre de 2018

LEHMAN BROTHERS

10 años del Gran Error (dejar caer) y la Super Oportunidad Perdida (rediseñar el sistema)

La imagen de decenas de empleados trajeados abandonando la sede del banco Lehman Brothers en el 745 de la Séptima Avenida, NYC (USA), con cajas de cartón con sus objetos personales, dio la vuelta al mundo. La entidad tenía 25.935 empleados. La Reserva Federal —que, según se supo después por las actas de sus reuniones de 2007, no tenía ni idea de lo que se le venía encima a la economía— anunció medidas de urgencia para frenar el desastre. Pero no fueron capaces de frenar el derrumbe del sistema. Las agencias de calificación de riesgo volvieron a reaccionar demasiado tarde. Tras la noticia de la suspensión de pagos, salieron en avalancha a rebajar la calificación de Lehman. Pero hasta el día anterior tenían calificaciones de alta solvencia para la entidad que había presentado la may or suspensión de pagos de la historia. 2 años después, la autopsia de la quiebra destapó que en el seno de la entidad había un entramado trabajando desde hacía tiempo para tapar los desmanes y esconder la deuda fuera del balance oficial. La Reserva Federal estimó 5 años después en US$ 12,6 billones la cantidad que movilizó para estabilizar el sector financiero, lo que equivale a más del 80% del PIB estadounidense de 2007. Eso sin contar con unos tipos de interés estancados en el 0% desde diciembre de 2008.
Por URGENTE24
Por entonces empleados de Lehman Brothers, reciben la información que se quedaron sin trabajo.
Las primeras alarmas por el exceso de las hipotecas subprime sonaron con estruendo en 2007, por los problemas en las carteras de Bears Stearns, hicieron estragos en Bolsa y minaron la credibilidad del sistema financiero.
Lehman Brothers se vio gravemente afectada por la crisis financiera provocada por los créditos subprime.Y acumuló enormes pérdidas por títulos respaldados por las hipotecas a lo largo de 2008.
En el 2do. trimestre fiscal, Josh McGregor declaró pérdidas por US$ 2.800 millones y la empresa se vio obligada a vender US$ 6.000 millones en activosEn el 1er. semestre de 2008, Lehman había perdido el 73% de su valor en bolsa. En agosto de 2008, Lehman informó que tenía la intención de despedir al 6% de sus recursos humanos, unas 1.500 personas.
El 13/09/2008, Timothy F. Geithner, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva York, convocó a una reunión sobre el futuro de Lehman en la que se incluía la posibilidad de liquidación de sus activos para sanear la empresa. Lehman ya había perdido el 95% de su valor en Bolsa desde su máximo de 2007. Su apuesta por hacer negocio con las hipotecas basura se le había atragantado.

Henry Paulson, Ben Bernanke y Timothy Geithner: Los protagonistas del 2008.
Henry Paulson, Ben Bernanke y Timothy Geithner: Los protagonistas del 2008.

Lehman informó que estaba en conversaciones con el Bank of América y Barclays para una posible venta de la empresa.
Pero las negociaciones con ambas entidades, fracasaron. Bank of America se quedó con Merrill Lynch.
El lunes 15/09/2008, Lehman Brothers se declaró oficialmente en bancarrota tras 158 años de actividad. Sus principales empresas dependientes del grupo fueron Lehman Brothers Inc., Neuberger Berman Inc., Aurora Loan Services Inc., SIB Mortgage Corporation, Lehman Brothers Bank, FSB, y el Grupo Crossroads.
Los efectos de aquel seismo, que costó US$ 22 billones a la economía de USA, aún se sienten por toda la economía global. Esa misma noche, los analistas advirtieron: "Tendrá importantes consecuencias para el sistema financiero del país".
Antes de Lehm an, otros 2 bancos de inversión estadounidenses ya habían capotado por: las entidades hipotecarias semipúblicas Fannie Mae y Freddie Mac.
Pero el derrumbe de Lehman Brothers fue la señal definitiva que las hipotecas basura y los activos tóxicos, ocultos y empaquetados dentro de millones de productos de inversión y fondos de todo el mundo —y respaldados por una especie de seguros inútiles— habían infectado todo el sistema.
El 17/09/2008 Barclays anunció la compra de la división bancaria del grupo por US$ 1.750 millones, con un activo de US$ 72.000 millones y un pasivo de US$ 68.000 millones. La compra incluyó la sede central de Lehman Brothers en Nueva York. Pero la compra se canceló debido a que la decisión de comprar esta entidad a última hora requería que todos los accionistas de Barclays con derecho a voto tenían que estar de acuerdo en realizar dicha compra, lo cual no ocurrió y los gerentes de Lehman se vieron obligados a anunciar su declaración de bancarrota.
1 semana después, Nomura Holdings anunció su intención de adquirir las franquicias de Lehman Brothers en la región de Asia-Pacífico, incluyendo las divisiones en Japón, Hong Kong y Australia, y las divisiones de banca de inversión y negocios patrimoniales en Europa y Oriente Medio. Este acuerdo se hizo efectivo el 13/10/2008.
Lehman Brothers, el banco Nº4 en aquel momento (tras Goldman Sachs, Morgan Stanley y Merrill Lynch), sobrevivió a una guerra civil, a la crisis bancaria de 1907, a la crisis económica mundial conocida como el 'crac' de 1929, a escándalos en su papel de intermediador de bonos y a colapsos en hedge funds, pero no consiguió superar la crisis subprime de 2008 que constituye, con un pasivo de US$ 613.000 millones, la mayor quiebra de la historia hasta el momento.
Posteriormente, se presentaron alegaciones de negligencia que incluso llegaron a acusaciones criminales. La quiebra de Lehman Brothers es la mayor quiebra en la historia de USA. Además, la quiebra de Lehman impulsó la doctrina del "too big to fail" (demasiado grande para caeer).
El 20/09/2008, el acuerdo fue revisado y aprobado por el juez de bancarrota estadounidense James M. Peck.

A remate la marquesina de Lehman Brothers.
A remate la marquesina de Lehman Brothers.

10 años después, escribe Cristina Vallejo en Finanzas.com/ (de Madrid, España):
A punto de que se cumplan diez años del acontecimiento que se ha convertido en el mito fundacional de la crisis financiera, la caída de Lehman Brothers, aunque ésta hubiera arrancado un año antes, si bien quizás no hubiera sido tan grave y tan profunda si las autoridades estadounidenses hubieran decidido otro final para la entidad, es posible hacer un inventario de lecciones (o recordatorios) que nos ha dejado la pasada década.
1. La última crisis financiera dejó de manifiesto el elevado grado de financiarización de la economía y el efecto multiplicador que en las crisis económicas tienen las dinámicas de los mercados de capitales. Los "an imal spirits" de los que hablaba John M. Keynes, las ventas masivas de acciones, de bonos y de complejos artefactos financieros por parte de unos inversores aterrorizados, son capaces, por ellos mismos, de destruir la solvencia de bancos, empresas y Estados, al igual que sus desaforadas compras previas ayudaron a hinchar burbujas o, como mínimo, a llevar los precios por encima de su valor justo.
Se pasó de la exuberancia irracional de la que hablaba el ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan y que impedía valorar bien los riesgos a todos y cada uno de los actores de los mercados (desde prestatarios a prestamistas, desde las agencias de rating a las casas de análisis y, por tanto, a los propios inversores) a la desconfianza absoluta, a pensar que el valor justo de ciertos o de muchos activos era cero. Otra vez Keynes: los mercados se pueden mantener irracionales más tiempo del que un actor puede mantenerse solvente. Y según la importancia y la dimensión de tal actor, los efectos en la economía real pueden ser devastadores. En el caso que nos ocupa, el ojo del huracán, el epicentro del terremoto estaba en la banca, en la desconfianza en los activos problemáticos que pudieran esconder, en las minusvalías latentes que tenían en sus balances. Las sospechas de unas entidades sobre otras, agravadas por quiebras, primero pequeñas, luego la enorme de Lehman, a continuación las que se evitaron con nacionalizaciones, secaron el crédito interbancario, pusieron en serios aprietos a las entidades débiles y como consecuencia, mermaron la financiación a la economía real.
Después de siglas como MBS (mortgage backed securities) o CDO (collateralized debt obligation), los paquetitos financieros construidos con deuda hipotecaria y de todo tipo y de calidad desigual sobre todo en USA y en el Reino Unido y que se diseminaron por todo el mundo, aprendimos el concepto de "credit crunch": la restricción crediticia.
El poder de los mercados (de la comunidad inversora, en la que, sin duda, hay manos muy fuertes con capacidad real de mover los precios y los ánimos) es muy grande y tiene efectos en la economía real. Pero también sucede al revés.
En España, la crisis financiera llegó más tarde y puede cundir la idea de que la gravedad de la situación de la economía real y el deterioro progresivo fueron los que ocasionaron los problemas en una banca sin exposición a productos complejos americanos y que presumía del volumen de sus provisiones, es decir, del colchón para absorber shocks económicos. Pero con el paso de los meses, de los trimestres y de los años, el valor de sus activos, especialmente inmobiliarios, que es en los que habían concentrado su cartera de crédito, fue bajando y ocasionando problemas en las entidades. Sobre todo en las cajas de ahorros, que no tenían manera sana de fortalecer su balance: a diferencia de los banc os, no podían ampliar capital. El atajo que utilizaron (también los bancos, pero sin tan tumultuosas consecuencias), las preferentes de tramposo nombre, instrumento ya existente pero que en la crisis se vendieron en ventanilla y a cualquiera como cuentas corrientes y depósitos, fueron causa de verdaderos dramas.

Enorme la contribución de Barack Obama para rescatar la economía que hundieron los republicanos.
Enorme la contribución de Barack Obama para rescatar la economía que hundieron los republicanos.

2. Las consecuencias de las equivocaciones en política económica pueden ser devastadoras. Se comprobó con la que llevó a dejar caer a Lehman Brothers. También con el error de diagnóstico de la situación de la banca española, por infraestimar los riesgos que había asumido concentrando toda su actividad en el sector inmobiliario que contribuyó a sobredimensionar. Tampoco se acertó a la hora de calcular la duración y la gravedad que terminó teniendo la crisis económica en España en particular.
Pero también hubo aciertos en el diagnóstico, es decir, a la hora de determinar por qué el mundo estaba asistiendo a una verdadera hecatombe: la culpable era la desregulación financiera de los años previos. Y pronto se tomaron medidas para rectificarla.
Barack Obama, al llegar a la Casa Blanca, en enero de 2009, comenzó a hablar de la necesidad de cambio s en la regulación y un año y medio después, en julio de 2010, se aprobaba la Ley Dodd-Frank, no sin dificultades y sin presiones de la industria financiera. Algunos de los puntos importantes de la norma, que describen Emiliano González Mota y José Manuel Marqués Sevillano, del Banco de España, son la limitación del tamaño de las entidades financieras, el coto a los riesgos en que pueden incurrir, la separación de la banca comercial de la banca de inversión para que los errores en la segunda no se lleven por delante a la primera y el diseño de procesos de resolución que no tengan coste para los contribuyentes.
Todo ello suena bastante bien. Pero la realidad es que los bancos ahora son más grandes. El sector se ha concentrado. No hay más que echar un vistazo a lo que ha ocurrido con la banca española.
Sin embargo, no hay minusvalorar que durante el estallido de la crisis y en los años inmediatamente posteriores, se sabía lo que había qu e hacer. Faltó voluntad política para controlar a la banca cuando estaba más débil, cuando estaba, incluso, rescatada con dinero público. Fue la gran oportunidad perdida para rediseñar el sistema financiero mundial. Aunque nunca es tarde para retomar el camino que se sabía acertado y, sobre todo, necesario.
3. Otra de las cosas que hemos aprendido en los últimos años es que los Estados y los Gobiernos siguen siendo poderosos. Fueron ellos los que diseñaron planes de rescate para las entidades. Fue el dinero público el que salvó al sector financiero. No sólo en USA. También en Reino Unido, con el eficacísimo Gordon Brown durante esos años. Y en Holanda, en Bélgica, en España, o en Alemania de manera mucho más taimada...
Fueron también los Estados los que, en las primeras reuniones del G-20 tras el estallido de la crisis, supieron que ante el parón del sector privad o, el sector público tenía que responder con estímulos. Particularmente decisiva fue la reunión de los veinte grandes en Washington a finales de 2008. En su filosofía se enmarca el plan de gasto público más voluminoso desde la Gran Depresión que puso en marcha Barack Obama en diciembre de 2008. E incluso el criticadísimo Plan-E de José Luis Rodríguez Zapatero, también por aquéllas fechas. Y no olvidemos el enorme esfuerzo presupuestario de China.
Hubo un momento en que todos fueron keynesianos.
Bien es verdad que el encuentro de las potencias en Washington estuvo lejos de convertirse en el que había propuesto el ex presidente francés Nicolás Sarkozy diez días después de que quebrara Lehman Brothers: una convocatoria de los principales líderes mundiales para reconstruir el sistema financiero partiendo de cero, una refundación del capitalismo.
De hecho, el orden económico actual se parece demasiado al del año 2006. No sólo porque el sistema financiero funciona parecido y continúa siendo demasiado poderoso. También porque las políticas de estímulo público se abandonaron muy pronto, no fueron de aplicación en la crisis de deuda europea, por ejemplo, sino que se acentuó la austeridad que en Europa manda desde Maastricht. ¿Combatir una crisis de deuda con gasto público? Puede parecer estúpido, pero se pueden dar dos respuestas más o menos sensatas: que gaste quien no tenga problemas con sus finanzas públicas (Alemania); ¿y lo que se planteó en Grecia, Irlanda y Portugal no fueron rescates?, ¿rescates de las economías o de los acreedores?
Sí, la crisis financiera estadounidense que tuvo una réplica muy agresiva en Europa a partir de 2010 también nos ha enseñado lo dura que puede ser la Unión Europea y lo difícil que se puede convertir pertenecer al euro. Dos primeros ministros, Yorgos Papandreou y Silvio Berlusconi, fueron depuestos sin elecciones y fueron sustit uidos por hombres de Fráncfort y de Bruselas: Lukas Papadimos y Mario Monti.
4. Los Estados han salvado al capitalismo de sí mismo, pero todo hubiera sido diferente sin la política monetaria desarrollada por la Reserva Federal, el Banco de Inglaterra y, más tarde, el Banco Central Europeo.
Barack Obama formó un tándem perfecto con el presidente de la Fed, Ben Bernanke: la política fiscal expansiva tuvo en los programas de compra de activos que puso en marcha un especialista en la Gran Depresión a su compañero perfecto. Y si el BCE de Jean-Claude Trichet se equivocó subiendo los tipos de interés en el año 2011, el de Mario Draghi ha demostrado que un banco central puede ser imbatible y que las solas palabras de quien lo dirige cambian la dirección del mercado: su "whatever it takes", su advertencia a quienes especulaban contra el euro y contra sus Estados salvó a la moneda ú nica y a sus economías, en particular a la española y a la italiana, que eran las siguientes posibles fichas de dominó en caer tras Grecia, Irlanda y Portugal.
A la audacia de Draghi no se le da la importancia que merece: impuso su criterio, convenció de la necesidad de una política monetaria expansiva, de que el Eurobanco interviniera en los mercados de bonos privados y públicos, a sus compañeros alemanes, nada partidarios de ponerles las cosas más fáciles a los pecadores del sur, de cobrar las deudas en euros depreciados o de correr el riesgo de que imprimir dinero diera lugar a su temida inflación (que, oh casualidad, también ayuda a mermar el monto del apalancamiento).
Ahora es verdad que la normalización de la política monetaria, sobre todo de la americana, está ocasionando problemas: es la razón de fondo que los analistas esgrimen para explicar la crisis emergente.

Nunca se valoró el aporte de Mario Draghi, desde el Banco Central Europeo.
Nunca se valoró el aporte de Mario Draghi, desde el Banco Central Europeo.

5. Aunque había pobreza y desigualdad antes de la crisis, y muy enquistada en países como España o Estados Unidos, la crisis económica y financiera ha elevado la conciencia social sobre estos problemas, ahora muy agravados.
La preocupación se deriva tanto de la propia existencia de la desigualdad y la pobreza como por sus consecuencias en el panorama político y a largo plazo en el propio desarrollo económico. Tal es así que en los últimos años organizaciones como el FMI o el Banco Mundial, así como la reunión de Davos, han hecho hincapié en la necesidad de la redistribución de la riqueza. Pero se ha hecho tan poco al respecto que cabe pensar que los suyos sólo son mensajes diseñados por los departamentos de márketing para mejorar la imagen de instituciones con muy mala reputación.
Hablar de que se ha hecho poco sería ser demasiado optimista. Si el Estado fue muy proactivo y eficaz en la salvación del sistema capitalista para que fuera posible que continuara el "business as usual", no ha mostrado la misma preocupación por reducir el sufrimiento de la población que vivía la crisis, algo que sí hizo el New Deal de Roosevelt. Al contrario, ese "business as usual" que los poderes públicos ayudaron a reconstruir ahora disfruta de mayores márgenes porque paga salarios más bajos y menos impuestos.

jueves, 6 de septiembre de 2018

Compras en dólares con la tarjeta de crédito

Los consumos en pesos y en dólares mantienen esa moneda en el resumen de la tarjeta de crédito.

En operaciones en otras monedas (euro, real, peso chileno, etc.) los montos se convierten a dólares al tipo de cambio que determina cada emisor (Visa, Mastercard, American Express, etc.).

El tipo de cambio es el del día en que se realiza el pago del resumen de la tarjeta y es independiente de la cotización del día en el que se hizo la compra o del día en que cierra la tarjeta (límite de qué consumos ingresan en el período). O sea que ni la fecha de compra, ni la fecha de cierre, afectan el monto final a pagar por el usuario.

Ejemplo: si se realizó una compra el día 14.8.18 en EE.UU. por US$ 50 y ese día el tipo de cambio cerró a $ 30,84 el importe en pesos era de 1.519.
Sin embargo si pagase hoy con un dólar a $ 40, debe abonar $ 2.000; vale decir una diferencia de $ 481 en más.

El cliente si tiene una cuenta en dólares estadounidenses puede pagar su consumo en esa moneda con débito a dicha cuenta.

Las tarjetas se pueden pagar antes del cierre con el llamado "cierre parcial". Esto debe acordarlo con el Banco emisor.

Los consumos financiados (entre pago total y pago mínimo) son recalculados al nuevo tipo de cambio a la fecha de pago del resumen.